Huellas Sotaventistas

“Siente las ideas, el cerebro es una máquina para soñar” ¿Quién eres realmente? Las emociones forman una gran parte de nuestras vidas, estas revelan nuestro estado de ánimo y se van formando con la ayuda de las personas con quienes convivimos, en el que es muy reflejado el dialogo, que muchas veces es tranquilo pero desafiante.

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La pregunta difícil tiene que ver con la capacidad de sentir, de entender con el sentimiento que tenemos de la realidad, es decir la consecuencia. Es un estado fisiológico en el que quieres, respetas y entiendes los diferentes puntos de vista de los demás para que así al fin puedas saber quién eres realmente.

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Rodolfo Llinás, el neurocientífico más importante de Colombia, ha sido de gran importancia debido a sus aportes para el estudio del cerebro. Este investigador menciona como toda esta aventura empezó en el Rio de Magdalena el cual fue a visitar con su abuelo quien fue un gran médico, juntos se dirigían a Bogotá en un barco que a su alrededor se encontraba lleno de animales, a Rodolfo le causó mucha tristeza ver a los cocodrilos los cuales vivían en un hábitat muy sucio. Al llegar a casa, ya nada lo veía como antes por lo que había visto aquel día, ya que su familia le hizo pensar que vivía en una fantasía donde todo era bueno y lo malo no existía.

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Rodolfo era un niño muy inquieto, le gustaba investigar e incluso crear elementos. Aquel niño pensaba que un libro siempre se representaba a través, únicamente, de letras, pero no, su abuelo le explicó que un libro también podría representarse con símbolos y dibujos, desde ese día Rodolfo se preguntó: ¿Cómo funciona nuestro cerebro?

Es así como durante 30 años estuvo peleando para que los colombianos tuvieran una mejor educación que nos permita ser mejor de lo que somos ahora “realmente pensar y educar no es difícil”. Tras la publicación del libro de él y Pablo Correa, Alejandro Gaviria (ministro de salud) lo leyó e hizo una observación: en el libro más que todo hay un atributo a la personalidad de Rodolfo Llinás.

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Es importante recalcar que Llinás, en su adolescencia, fue a Suiza en busca del famoso Walter Jess al cual le explicó que era un gran estudiante de medicina, pero les parecía extraño que hubiera un suramericano en Suiza. Todo este encuentro sucedió por medio de un libro, después de esto juntos empezaron a resolver inquietudes por medio de experimentos en los que cogían a un gato y les ponían electrones en la cabeza, pero el problema era que en Suiza había pocos gatos. Es así como, en Italia empezó a hacer experimentos con su profesor Carlo Terzuelo, pero se preguntaban cosas como: ¿dentro de las neuronas hay dendritas, estas son pasivas? ¿Qué es la inhibición dendrítica?, todo esto pudieron responderlo por medio de experimentos los cuales fueron efectivos y en el día en que tuvo que explicar sus experimentos, nadie le creyó, así que viajo hasta Australia y confirmó a las personas entre ellas Jonh Helcolt que lo que él decía si era verdad. Después de estas aventuras conoció a el amor verdadero el cual en la actualidad perdura, en cuanto a la religión es muy poca la información suministrada; pero aun así Llinás responde a la pregunta ¿Por qué? Rodolfo piensa en el bienestar de los demás y el de él, respeta sus puntos de vista, no juzga, acepta. Y lo más importante es que comparte lo que piensa hacia los demás no como una crítica, si no como un consejo de un gran experimentador.

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Por: Laura Ximena Montenegro Puentes 

Estudiante de 802

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Tomado de https://youtu.be/S1UU-Ldr2ys

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